¿Qué es la acupuntura?
Originaria de China, la Acupuntura es un método terapéutico caracterizado por la inserción de agujas en la superficie del cuerpo, para tratar enfermedades y promover la salud.
La acupuntura está reconocida como especialidad médica desde 1995 por el Consejo Federal de Medicina en países como Brasil, por ejemplo.
¿Cómo funciona la acupuntura?
Gracias a las investigaciones científicas realizadas durante los últimos cincuenta años, tanto en China como en Occidente, se han revelado los efectos de la Acupuntura. Su mecanismo de acción ha sido demostrado a la luz de la ciencia actual, teniendo bases fisiológicas.
La inserción de la aguja de Acupuntura estimula las terminaciones nerviosas de la piel y los tejidos subyacentes, principalmente los músculos.
El “mensaje” generado por estos estímulos viaja a través de los nervios periféricos hasta el sistema nervioso central (médula y cerebro).
Allí desencadena la liberación de varias sustancias químicas conocidas como neurotransmisores, desencadenando una serie de efectos importantes, como analgésicos, antiinflamatorios y relajantes musculares, además de la acción moduladora sobre las emociones, el sistema endocrino e inmunológico y sobre varios otras funciones orgánicas. .
¿Cuáles son las indicaciones de la acupuntura?
El campo de acción de la Acupuntura es amplio, debido a su propia naturaleza y mecanismos de acción, ya que al estimular el sistema nervioso, regula y armoniza el funcionamiento del organismo en su conjunto.
Tanto en la investigación clínica como en la práctica diaria se ha observado una gran eficacia en el tratamiento de numerosas enfermedades y disfunciones orgánicas: neurológicas, psiquiátricas, ortopédicas, respiratorias, reumatológicas, digestivas, entre otras.
Ante esto, la propia Organización Mundial de la Salud (OMS) enumeró todas las enfermedades tratables mediante Acupuntura. Innumerables estudios científicos, realizados en todo el mundo, han ido añadiendo constantemente más elementos a esta lista de indicaciones.
¿Cómo se presta el servicio?
La atención brindada por un acupunturista va mucho más allá de simplemente “insertar agujas en el cuerpo del paciente”. Este es solo uno de los pasos de una serie de procedimientos que siguen la misma secuencia que una consulta médica de otra especialidad.
Por ello, durante la anamnesis se escuchan y anotan las historias y quejas del paciente. A continuación se realiza un examen físico y, cuando es necesario, se solicitan e interpretan pruebas adicionales.
Esto le permite al médico hacer un diagnóstico clínico. Con base en este diagnóstico, el médico decide si la Acupuntura está indicada para esa situación clínica y si es necesario prescribir algún medicamento, así como asociar otra forma de tratamiento complementario.
Finalmente, el médico establece un pronóstico, informando al paciente sobre las posibilidades de éxito del tratamiento realizado y, en su caso, sus limitaciones. Eventualmente, si es necesario, deriva al paciente a un médico de otra especialidad, para una evaluación o incluso para continuar el tratamiento.
¿Qué profesionales están calificados para su práctica?
Las únicas profesiones de la salud en el país que, por ley, tienen derecho a diagnosticar enfermedades, realizar procedimientos invasivos y prescribir medicamentos son los médicos, dentistas y veterinarios.
El Colegio Médico Brasileño de Acupuntura aboga por que la práctica de la Acupuntura, en Brasil, sea realizada por estos profesionales, en sus respectivos campos de actividad.
¿Necesito suspender otros tratamientos?
No, porque en la mayoría de los casos la asociación de la Acupuntura con otras formas de tratamiento no sólo es posible, sino también beneficiosa para el paciente.
Sin embargo, sólo después de realizar una consulta y definir el diagnóstico podrá el médico determinar qué tratamiento es el más adecuado para cada cuadro clínico. Por tanto, se pueden asociar medicamentos, fisioterapia y otros métodos de tratamiento complementarios a la Acupuntura.
¿Pueden las agujas transmitir enfermedades?
La normativa de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (ANVISA) determina que la Acupuntura se realiza exclusivamente con material desechable. Sin embargo, algunos profesionales sin la formación adecuada insisten en reutilizar las agujas.
Es importante saber que este procedimiento puede provocar numerosas enfermedades. Estos incluyen hepatitis, meningitis, mastoiditis, encefalitis, etc. Por ello, cabe señalar que las agujas nunca deben reutilizarse, ni siquiera en el mismo paciente, ya que una vez almacenadas pueden contaminarse.
¡ATENCIÓN, SÓLO AGUJAS DESECHABLES!
¿Existe algún riesgo para el tratamiento?
Bien practicada, la acupuntura es segura. Sin embargo, el riesgo más prevalente no se refiere en realidad a la Acupuntura en sí, sino a su práctica por profesionales sin la cualificación adecuada y que desconocen la anatomía normal, sus variantes y la elaboración de un diagnóstico y pronóstico.
Como en el caso, por ejemplo, de un tratamiento de Acupuntura, realizado por un profano, para el dolor abdominal, pero que en realidad es una apendicitis.
Además, el uso de un método invasivo, quirúrgicamente perforante, por parte de personas sin formación específica, ha dado lugar a incidentes de negligencia, incompetencia e imprudencia, además del delito de brujería, denunciado en numerosos casos en la literatura médico-científica mundial, como como Infecciones, transmisión de enfermedades, lesiones y perforaciones.
Y lo que contribuye a agravar aún más estos posibles sucesos es el hecho de que, habiendo sido provocados por un profano, le resulta muy difícil tener discernimiento para darse cuenta de que provocó un efecto adverso y mucho menos poder corregir el daño causado.
Como resultado, el paciente lesionado puede tardar mucho tiempo en ser diagnosticado adecuadamente y recibir la atención adecuada, lo que podría incluso provocar la muerte.