La ley de la similitud en la homeopatía
¿Conoces la ley de la similitud en la homeopatía? La homeopatía es un método de tratamiento basado en administrar dosis diluidas muchas veces, de sustancias con propiedades medicinales. La acción de la homeopatía se basa en la idea de que si una sustancia provoca en el organismo los síntomas de una enfermedad, también posee las propiedades para curarlo (principio de similitud).
¿Qué es la ley de la similitud en la homeopatía?
Un nobel: El virólogo francés Luc Montagnier y 250 expertos reivindican la eficacia de la homeopatía en un congreso en San Sebastián.
Denuncian «el gran desconocimiento» y «negacionismo» que existe contra este tipo de medicina…
Historia de la homeopatía
Hace más de 250 años, la homeopatía nacía de la mano del médico alemán Samuel Hahneman, (1755-1843). En ella, se manifiesta la ley de la similitud, o lo que es lo mismo: lo similar cura lo similar.
La explicación a ésta ley es que si a un individuo sano se le administran unas sustancias y le producen unos síntomas, éstas mismas sustancias se administran en dosis infinitesimales a otro individuo enfermo que tenga los mismos síntomas, y curarlos: las dosis infinitesimales son el ‘empuje’ que necesita el organismo para dar un estímulo a las capacidades de autocuración que todos tenemos.
Historia de la ley de la similitud en la homeopatía
Con la homeopatía se busca llegar a la cura por el camino menos invasivo e inofensivo, haciendo prevalecer la idea de que ‘lo primero es no dañar’
La ley de la similitud en la homeopatía
En la elaboración de un remedio basado en la homeopatía se usan sustancias de origen vegetal, mineral o animal, que se diluyen y se dinamizan, consiguiendo de ésta manera sus propiedades terapéuticas. Las diluciones se hacen con agua, alcohol o lactosa, según el procedimiento estándar que desarrolló Hahnemann.
Corrientes de la homeopatía
Hay dos grandes corrientes de homeopatía: la homeopatía unicista o clásica, y la homeopatía complejista.
La clásica o unicista
La clásica o unicista, que es la que investigó el Dr. Samuel Hahnemann; es la más conocida y la que tiene más años de estudio.
En ésta corriente, no se emplean de forma simultánea varios remedios para los diferentes síntomas de una persona.
Lo que se hace es emplear un remedio único para tratar el desequilibrio de fondo que produce todos los síntomas en la persona a tratar. De ésta manera, a parte de tratar las molestias inmediatas que padece la persona, también se le ayuda a fortalecer su salud general, evitando la aparición de dolencias más graves.
La homeopatía complejista
La homeopatía complejista difiere de la clásica porque no utiliza un solo remedio, sino que actúa con varios remedios simultáneamente para tratar varios síntomas, y con diferentes potencias.
Éstos productos homeopáticos están elaborados en laboratorios farmacéuticos. En éste caso, el principio de similitud descrito al principio, simplemente desaparece. Con la homeopatía pluralista hay más posibilidad de acertar que si se da un remedio solo, pero los detractores de ésta corriente argumentan que el médico dedica menos tiempo para identificar el origen de los síntomas.
Los remedios homeopáticos están indicados para cualquier patología, independientemente de que se trate de una enfermedad crónica o aguda, pudiendo usar la homeopatía como un método de prevención, y combinado con otras técnicas.
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