Yoga en Pontevedra, Clases de Yoga en Pontevedra

Ven a disfrutar de los beneficios del Yoga en Pontevedra con nuestras clases de yoga

El Yoga es una ciencia, una práctica largamente experimentada, con más de 5.000 años y original de la India; que impartimos en Pontevedra en nuestra Escuela de la Avenida Juan Carlos I número 22, bajo.

La práctica regular del yoga desbloquea y trasmuta la energía contenida como tensión, dolor, ira y miedo. La práctica física combinada con las meditaciones, la respiración y relajación te ayudarán a aclarar la psique, limpiar el subconsciente y equilibrar la energía emocional. 

Practicando yoga en Pontevedra lograrás que las energías de tu cuerpo se purifiquen, se intensifiquen y circulen con entera libertad (esto lo hacen los asanas y el pranayama). También lograrás profundizar y elevar la conciencia, mediante la relajación y la atención mental (en la meditación y también en las asanas y el pranayama).

La sociedad actual está atada a multitud de preocupaciones y a un gran estrés basado la mayoría de las veces por los propios pensamientos de cada uno. Así, mediante la práctica de yoga y meditación que impartimos en Pontevedra, podrás «desconectar» y centrarte en el «aquí y ahora». 

Asana se define como “postura o pose”. Las posturas son la ciencia de estirar y soltar, tensar y aflojar. Los  asanas hacen que el cuerpo asuma posturas que de otro modo jamás adoptaría,  influyendo en todo el organismo  de forma beneficiosa. Consisten en una actividad que se realiza de forma suave y consciente.

Asistiendo a clases de yoga en Pontevedra podrás descubrir que las claves de la práctica de las asanas son: la lentitud de movimientos (se hace y deshace la postura con lentitud, conscientemente, evitando movimientos precipitados o bruscos), la fase estática o de mantenimiento de la misma (se ejecuta la postura hasta el límite razonable y se mantiene el tiempo indicado), la respiración lenta, consciente y dirigida (si es posible, se efectúan respiraciones pausadas y por la nariz), y la atención mental en estado de alerta, y receptivo a lo que está sucediendo (permanecer muy atento durante la práctica, evitando en lo posible divagaciones mentales, así la postura no sólo tiene implicaciones fisiológicas y energéticas, sino también mentales). 

Pranayama significa literalmente «extender la fuerza vital», o prana, es una práctica increíblemente rica que consiste en muchas técnicas respiratorias que varían en complejidad. Las hay tan sencillas que cualquier niño las puede realizar; y otras más complicadas, cuyos beneficios sólo se consiguen con el tiempo. El yoga impartido en Pontevedra trabaja las técnicas de pranayama correctas, con las que estimularás el sistema nervioso parasimpático y activarás la respuesta de relajación reduciendo el estrés. 

Es decir, practicando yoga en Pontevedra conseguirás, entre otras cosas:

– Trabajar y estimular todos los sistemas del cuerpo, fortaleciéndolos y mejorando su funcionamiento: músculo-esquelético, inmunológico, linfático, glandular, nervioso, circulatorio, respiratorio, digestivo y urinario-reproductor.

– Aumentar y conservar la flexibilidad corporal: el cuerpo no se estira por si sólo y, al faltarle extensión se vuelve rígido y origina dolores.

– Fortalecer y tonificar todo el cuerpo: el músculo que no se utiliza se atrofia, con el yoga se trabaja todo el cuerpo.

– Flexibilizar y fortalecer las articulaciones: las articulaciones no utilizadas van perdiendo su movilidad. Los músculos se hacen más fuertes y las articulaciones se alimentan. La espina dorsal se nutre y se mejora la masa ósea a través de las posturas.

– Mejorar la circulación: pone el corazón a punto y permite que descienda el nivel de cortisol u hormona del estrés.

– La progresiva purificación del cuerpo.

– El desarrollo de sus potencialidades.

– El perfeccionamiento de su funcionamiento.

– El cuerpo gozará de mayor vitalidad y salud (los músculos se sueltan y aumenta la propiocepción, es decir, la habilidad para sentir lo que el cuerpo está haciendo y cómo está situado en el espacio, mejorando el equilibrio físico).

– El estado de ánimo será más positivo, optimista y dispuesto.

– La mente percibirá de manera más rápida y veloz.

– Conseguir la paz en la mente: calma, relaja y disminuye el estrés. Enlentece la respiración y centra en el presente, armonizando el equilibrio entre el sistema nervioso simpatico, el de la respuesta de huída o lucha, y el sistema nervioso parasimpático.

– Aumentar la atención, concentración y memoria: cuanto más presente esté uno consigo mismo, más presente estará con los demás.

– Aumentar y expandir la conciencia.

– Prevenir trastornos somáticos y psicosomáticos y ayudar en los desórdenes emocionales o psíquicos. Prevenir el envejecimiento prematuro y mantener el cuerpo flexible y resistente.

Occidente tuvo que esperar hasta los años 60 para descubrir el yoga. Desde entonces, el yoga ha viajado en el espacio y en el tiempo hasta convertirse en un fenómeno mundial. Las técnicas han evolucionado, pero los movimientos y los ideales originales se han mantenido. Una alternativa en Occidente contra el estrés y la ansiedad que causa el ritmo de la vida moderna. ¿Te animas?.

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